
Seguimos en cuarentena. Enfrentados a una situación de incertidumbre y miedo absolutamente desconocida para el ser humano.
Son momentos de dudas, de tensión, que nos afectan cada momento del día.
Estamos sometidos a una alarma constante y nuestra respuesta al miedo que sentimos es normal. Recordemos, el miedo es la emoción que tenemos cuando nos vemos sin recursos para responder a algo que percibimos como un peligro. Nuestras respuestas biológicas, en esos momentos, son de parálisis, pelea o huída y es la respuesta normal, la que nos pide el cuerpo.
Sin embargo, las personas tenemos una mente poderosa, una mente capaz de darnos cuenta de cómo nos sentimos y de hacer elecciones de cómo responder y, además, de aprender de ello y salir fortalecidos.
Podemos elegir cómo sentirnos, es nuestra libertad más íntima, más humana.
Es el momento de decidir con qué ánimo te lo tomas, si te hundes o flotas, si te dejas arrastrar o nadas decididamente.
Estamos unidos en esto y tu reacción cuenta. Lo que contagias a los demás, marca la diferencia en tu entorno.
Así que la pregunta es: ¿Cómo decides sentirte tú? ¿Qué decisiones estás tomando ahora mismo sobre tu forma de afrontar esta crisis?
Ya sabes que crisis al revés en chino significa oportunidad. ¿La vas a aprovechar?
Dicho de otra manera: lo importante es hacerse cargo de uno mismo.